27/12/10

ALBERGUE TRANSITORIO


Caminamos sin importar el tiempo
antes y después

Bebimos en la esquina de la predestinación
y recibí el beso cinemascope tan esperado

El mundo quedó suspendido por  unas horas
en el albergue de los mandalas graffiteados

Descubrí nuevamente mi piel bajo tus manos
y escuchamos esa vieja tonada de idilios imposibles

Caminamos de la mesa a la cama
y viceversa
y viceversa

Mi corazón se acercó a tu vida viajera
y reventó en luces multicolores

Noche mágica donde no hubo miedo
sólo esta pasión concentrada
de ser quién somos

Madrugada del sur
Madrugada de amor urgente
y luna llena

2 comentarios:

El Toro de Barro editorial dijo...

La pasión de ser quienes somos...

PERSA dijo...

Sí, y que mejor pasión compartida que el ser, que el aceptarnos tal y como somos y soñamos ser. Te abrazo.